Los adolescentes abusan de una variedad de drogas, tanto legales como ilegales. Las drogas legales disponibles incluyen las bebidas alcohólicas, las medicinas con receta médica, los inhalantes (vapores de algunos pegamentos, aerosoles y solventes) jarabes para la tos, remedios para la gripe, el insomnio y para adelgazar. Las drogas ilegales de mayor uso son la marihuana, los estimulantes, las drogas diseñadas (éxtasis). El uso de las drogas ilegales va en aumento, especialmente entre los jóvenes o adolescentes. La edad promedio del primer consumo de marihuana es a los 14 años y el uso del alcohol puede comenzar antes de los 12 años. El uso de la marihuana y el alcohol en la enseñanza media se ha convertido en algo común.
El uso de las drogas y el alcohol está asociado con una variedad de consecuencias negativas, que incluyen:
• aumento del riesgo de uso problemático de drogas en la vida futura
• fracaso escolar
• puede exponer a los adolescentes al riesgo de accidentes, violencia, relaciones sexuales no planificadas y arriesgadas, y suicidio.
Los padres pueden prevenir que sus niños usen drogas en el futuro: hablando con ellos sobre las drogas y el alcohol, estableciendo una comunicación abierta, siendo modelos positivos, estableciendo límites consistentes entre los adultos a cargo, teniendo una conducta responsable y reconociendo y tratando desde el comienzo los problemas que vayan surgiendo.
Las señales que deben alertar sobre el uso de alcohol y drogas en los adolescentes pueden incluir:
• Signos físicos: fatiga, problemas al dormir, quejas continuas acerca de su salud, ojos enrojecidos y vidriosos y una tos persistente.
• Signos emocionales: cambios en la personalidad, cambios rápidos de humor, irritabilidad, comportamiento irresponsable, poco amor propio o autoestima, pobreza en el juicio, depresión, retraimiento y una falta general de interés.
• Signos en la familia: desobedecer las reglas, el retraerse o dejar de comunicarse con la familia.
• Signos en la escuela: disminución del interés, actitud negativa, calificaciones bajas, ausencias frecuentes, faltas al deber y problemas de disciplina.
• Signos de problemas sociales: nuevos amigos menos interesados en actividades escolares y familiares, involucrados en drogas y alcohol, y/o con problemas con la ley.
Algunas de estas señales pueden también ser signos de otros problemas emocionales. Si se sospecha uso/abuso de drogas o alcohol, al adolescente debe ser evaluado por un psiquiatra de niños y adolescentes o por otro profesional de la salud mental capacitado.